lunes, enero 8

Linea 2


Cuando me agota mi cuarto y ya no puedo respirar, camino 4 cuadras; aproximadamente 3437 pasos desde la puerta de mi casa, y llego a la estación del metro.
Parque O'higgins, linea 2.
En el camino se supone que había un palacio, en calle Mc Clure, pero lo demolieron e hicieron edificios. Y hay casas hermosas a la antigua, pero mal cuidadas. Y unos árboles a mal traer.

Despúes de los 3437 pasos aproximados, compro el boleto para subir esa escalera mecánica típica.
Pero antes miro los afiches que hay pegados, ya me los sé de memoria.
Y subo, hay como otro aire, es como pasar una barrera.
Miro hacia el andén y espero impacientemente a que pase el metro, pero amo esa estación, con todo su misterio y su estupidez.

Y llega el metro y odio la mirada de la gente.

Y me subo, siempre hay gente. Trato de que mi vista se posicione sobre el museo histórico militar, que parece un palacio antiguo, y luego trato de fijarme en el regimiento, que parece un castillo horrible.
También miro las calles aledañas, las mismas cosas de siempre que me parecen mágicas dentro de ese camino largo y encerrado.

Es raro, busco la libertad en más encierro colectivo. Tal vez es para volver con más ganas a mi casa, a desahogar mi mente aquí.

Llego a Toesca. Miro hacia el suelo y me imagino a mi amiga tirada en el suelo. E imagino cuál es el lugar exacto donde decidió dejar de respirar. Y me imagino si yo podría ser capaz de reventar mi cuerpo contra el andén.

Y luego llego a Los Héroes, que es horrible, siempre lleno de gente.

Dónde termina todo siempre?.



1 comentario:

Gabriela dijo...

Mi mamá nos decía que ese castillo era la casa de Blancanieves y por mucho tiempo cada vez que pasamos por ahi, pensamos que pasabamos por la casa de Blancanieves... hasta que supe que era un regimiento.

Hubo un día que intenté viajar hacia donde el metro llevara... aún así me costó sacar de mi cabeza el saber donde estaba. Curiosamente esa libertad la encuentro recostada en el pasto de un parque, pese a la gente y no sé por qué.

Cuidate amiga (te debo aún los mazapanes, eso lo sé).